LA HISTORIA NO CONTADA DE LAS OSTRAS

Creo que la historia de las ostras y su aburrimiento mítico es un poco cargante:

 Hace tiempo, mucho tiempo, las ostras eran unos seres de lo más divertidos... de fiesta todo el día, con los colegas paquí y pallá.

 Un día, a una de ellas se le ocurrió que para pagar tanto despiporre tenía que fabricar algo... y va y no se le ocurre otra cosa que hacer una perla.

 Claro, como le salió tan bien, la vendió a muy buen precio y todas las demás ostras (que dicho sea de paso no tenían aún concha) viendo el éxito, empezaron a copiar y copiar las perlas...

Qué exitazo! todas las ostras fabricando collares y pendientes que se vendian superbien!

 Al final pasó lo que algunas ostras (expertas en finanzas) habían predicho: con tanta perla en el mercado, el precio cayó y cayó.. y empezó una crisis de puta madre, es lo que pasa.

 Para hacer frente a la crisis, las ostras tenían que trabajar más y más cada día y ya no salían a tomar ni una cervecita con los colegas, que rollo! -se decían-, con lo bien que nos lo pasábamos antes...

 Pero así son las cosas, también empezó la envidia y el temor a la delincuencia y con ella la necesidad de protegerse; lo que hace el miedo ¿no?

 A una de ellas se le ocurrió otra idea genial para que los cacos no les robasen: ¿por que no fabricar un chalequito blindado?

Ni corta ni perezosa, aquella ostra se hizo una concha de lo más fea y chabacana, pero blindada de cojones... y como la protección pesaba tanto, ya no se pudo mover más (aunque no le importó mucho, porque desde hacía mucho tiempo ya no salía ni nada y como no existía el teléfono móvil ni facebook, también había perdido el contacto con sus amigos)

 Así son las cosas, fíjate que forma más tonta de caer en el aburrimiento: la codicia y el miedo acabaron con aquellos seres tan alegres y sociables que se autocondenaron al ostracismo, de ahí que a partir de entonces se les llamó ostras y quedaron como ejemplo de lo aburrida que puede ser la vida cuando no te puedes mover porque te inventas excusas como "seguridad" y "futuro".

 Y no se dieron cuenta de que lo más valioso que tienen todos los seres no se puede fabricar, ni blindar... y menos parar!

 Claro, es el tiempo, que pasa y pasa y no perdona y todo eso... Cada día una fina capita más de protección en esa concha, cada día más pesada...más difícil de mover y más aburrida!

 Moraleja, disfruta de la vida hoy, no seas ostra!